El Derecho Divino de Nacimiento de la Precipitación
Por el Gran Elohim Hércules
Amados míos, hemos llegado a un punto en que vosotros -que sois los constructores de la Nueva Era- tenéis que entrar a la ciencia de la creación. El desaliñado “albur”, la conciencia esperanzada y fiel que ingiere lo amargo junto con lo bueno… ¡no es suficiente! Una conciencia de esta índole tiene que ser reemplazada por un proceso científico de creación a través de vuestros mundos mental y emocional, mediante el cual ¡os volváis Maestros y permanezcáis siéndolo! Entonces, podréis canalizar por Nosotros dentro del mundo de la forma esas ideas y patrones que crearán el núcleo de la Edad Dorada Permanente que vuestro gran Maestro, amigo y padrino, Saint Germain tanto desea que se manifieste. ¿A través de quién sino de ustedes vendrá esta Era? Al presente, las únicas personas encarnadas a través de quienes Saint Germain puede trabajar son ustedes, que le habéis amado y servido a través de los años. ¡Ustedes son la puerta abierta! ¿Habéis pensado a cabalidad al respecto? Esto quiere decir que vuestra mente es un canal a través del cual tendrán que bajarse las ideas que llenan el Ámbito donde Él mora; y, entonces -a través de vuestras mentes, vitalizadas por vuestros sentimientos-, dichas ideas tendrán que ser precipitadas en expresiones manifiestas que sean una bendición para con la vida. Por lo tanto, vuestras mentes tendrán que ser entrenadas en el uso de los poderes que constituyen los dones de los Elohim. ¡Síganme ahora de cerca, por favor!
Los Siete Pasos a la Precipitación…
